ARMY OF TWO

Cuando me lio ahí a darle a la xbox suelo dedicar la mayoría de los ratos de vicio a jugar online con mi colega Kikales al Left 4 dead o a las hordas del Gears of war 2. Pero cuando este buen mozo no está conectado en línea para viciarnos a dobles, dedico los ratos de vicio a una de mis últimas adquisiciones que me tiene viciadísimo y que lleva por título Army of two. La verdad es que cuando lo compré lo hice un poco a ciegas (más que nada porque tenía buen precio y porque las imágenes que pude ver en la parte de atrás de la carátula parecía que tenía un aire al Gears of war). Y lo curioso es que la primera vez que lo probé no me enganchó demasiado ni me pareció gran cosa, supongo que porque me hacía un poco de lío con los controles. Pero en cuanto he jugado un par de veces más y ya me he hecho con los controles tengo que reconocer que me ha absorbido de lo lindo y en estos momentos es el juego al que más me vicio con diferencia. El argumento parte del hecho de la aparición desde hace algunos años de las corporaciones militares privadas, que han provocado que los gobiernos hagan uso de sus contratos con ellas para realizar ciertos trabajos “complicados” y de dudosa legalidad. De esta forma nos pondremos en el pellejo de los protagonistas (Elliot Salem y Tyson Ríos), que forman un dúo muy particular, armados hasta los dientes y protegidos por blindajes a cada cual más agresivo, e irán recorriendo el mundo realizando misiones en busca de una sola cosa: dinero.
Como podéis ver, se trata de un juego bélico cuya característica principal es la compenetración con el otro personaje para poder realizar las misiones que se nos encomiendan. Los escenarios de Army of Two nos llevarán por diferentes países, desde Irak, Afganistán, Somalia, China, Miami, étc... De esta forma, en la modalidad para un solo jugador deberemos ir avanzando ordenando a nuestro compañero la acción a realizar en cada momento, pues habrá ratos donde tengamos que ordenarle que avance disparando a lo bestia para abrirnos camimo y otras veces deberemos pedirle que mantenga la posición y nos cubra mientras nosotros rodeamos al enemigo para pillarle por la espalda y poder coserle a tiros a placer. Es también reseñable la variedad de armas que podemos comprar en el mercado negro a los traficantes, donde podremos emplear el dinero que vamos ganando en las distintas misiones para mejorarlas y aumentar su capacidad de daño, precisión, munición, étc... Así que estoy deseoso de que se lo pille pronto el Kikales para poder jugar en modo cooperativo, pues para mi humilde gusto se trata de un juego visualmente muy competente, divertido, directo y sobre todo que puede proporcionar horas y horas de vicio jugándolo con un colega a la hora de coordinar ataques e ir avanzando en cada una de las misiones.